Los viajes de incentivo son una herramienta motivadora que las empresas utilizan para premiar a sus mejores clientes, empleados o colaboradores, pero según las proyecciones elaboradas por Gebta y Braintrust, los desplazamientos por motivos profesionales a finales de 2020 estarán todavía por debajo del 50% respecto al año anterior y la recuperación de los volúmenes de actividad previos a la crisis sanitaria tardará al menos dos o tres años en alcanzarse.
Frente a este panorama, Meliá Hotels International se ha planteado cómo hacer viables los viajes de incentivos en la era de la COVID-19 y, desviándose del concepto más tradicional de viaje en grupo organizado, ha dado paso a un programa de incentivos individuales, vinculado al programa de fidelidad MeliáRewards.
“Ofrecer viajes de incentivo individualizados es la mejor opción en épocas en las que viajar en grupo puede estar sujeto a ciertas limitaciones. Por ello, observamos una clara tendencia a que las empresas incluyan estancias en hoteles en la cesta de Navidad para sus empleados o colaboradores, siendo un incentivo muy flexible para la época actual”, sostiene José Miguel Moreno, Global B2B Sales & Marketing Senior Di
A través del nuevo programa, la cadena ofrece a las empresas la oportunidad de regalar una estancia a sus clientes, empleados o colaboradores, con la posibilidad de que cada uno de ellos escoja el momento, el destino, el tipo de hotel y la duración
Este programa es posible mediante la compra de puntos MeliáRewards, que podrán distribuirse entre las personas que la empresa seleccione para que puedan hacer uso de ellos en cualquier momento.
Esta es una de las iniciativas que la hotelera está llevando a cabo para impulsar el segmento MICE adaptándose al contexto actual, ya que también ha innovado con un producto de teletrabajo para larga estancia.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario